El valor del metro cuadrado y las nuevas alternativas de financiamiento impulsarán la consolidación de las zonas industriales en la periferia de Lima en el mediano plazo, comenta Aissa Lavalle, country manager de Cushman & Wakefield.

Las zonas industriales en las periferias de Lima seguirán ganando atractivo, en la medida que avance la administración profesional de parques y condominios de almacenes, el valor del metro cuadrado permanezca estable y por debajo del valor de las zonas tradicionales, y se mantengan las nuevas alternativas de financiamiento a raíz de la pandemia.

La superficie de parques industriales desarrollados hasta el momento abarca alrededor de 2,500 hectáreas en Lima Metropolitana y parte de Cañete, y solo la zona sur concentra el 83.5% de la superficie total de de esta superficie, según un reciente informe elaborado por Cushman & Wakefield.

La formalización y administración profesional de estas zonas limita, poco a poco, la presencia de los espacios industriales stand alone. Estos espacios se concentran principalmente en las zonas del Callao, Este y Sur, los cuales tienen una superficie que suma más del 80% de estos espacios y han registrado un incremento del valor del metro cuadrado en los últimos años. Solo en el Callao los espacios industriales pueden llegar a cotizar hasta US$2,000 por metro cuadrado (m²), con un promedio que puede ir desde los US$500 a los US$650 por m².

Los mayores costos operativos de las empresas —aún mayores en pandemia— las impulsa a buscar nuevas alternativas de ubicación. Así, el atractivo de las nuevas áreas industriales crece debido a que vienen manteniendo un valor por m² relativamente estable en el tiempo, lo cual responde directamente al desarrollo de la zona y la variedad de oferta. Estas áreas pueden llegar a tener un valor 85% menor al de las zonas tradicionales. En este sentido, los precios de venta de los parques industriales en la zona sur se cotizan entre los US$80 y los US$210 por m² y, en la zona este, entre los $120 a $140 por m², dependiendo de la etapa de desarrollo del parque.

En el futuro las industrias que encuentren un equilibrio entre la distancia a los puertos y la generación de ahorros migrarán a estas nuevas zonas en desarrollo. Hoy ya cuentan con alternativas de financiamiento que antes no se presentaban, como built to suit —donde se cuenta con el apoyo de un inversionista para construir los almacenes y naves— y el sale & lease —la venta de un espacio para obtener liquidez y permanecer solo como inquilino—. Asimismo, esta migración se verá potenciada por la implementación de los proyectos de infraestructura vial —como el aeropuerto de Pisco— que minimizarán los tiempos de conexión a los puertos del Callao y de Ica.

Fuente: Semana Económica